domingo, 20 de febrero de 2011
MATANDO AL MAR MUERTO
- "Ustedes, los occidentales, lo llaman Mar Muerto," -nos decía un guía israelí cuando nos mostraba este famoso lago desde la Fortaleza de Masada- "pero para nosotros no es un mar muerto. Nosotros lo llamamos "Yan ha-Melah" o "Mar de Sal", y para nosotros es fuente de vida, de trabajo, pues de éste sacamos sal, minerales y barro que es bueno para la piel".
En efecto, el Mar Muerto es rico en minerales y la cantidad de sales que contiene lo ha convertido en fuente del trabajo durante siglos.
Es tan salado que es posible leer un periódico mientras se nada de espaldas, pero si te cae una gota de agua al ojo te dejará ciego por un minuto.
El Mar Muerto comparte territorios de Israel, Palestina y Jordania y además de ser uno de los más salados, es el lago más bajo del mundo, ubicado a 423 metros bajo el nivel del mar. La primera vez que visité el lo hice desde el lado jordano, y me sorprendió mucho saber que el nivel del agua había descendido casi 30 metros y que su orilla se había retirado unos 600 m en las últimas décadas.
Por supuesto, los jordanos culpan a los israelíes de haber desecado el mar en favor de proyectos de irrigación, mientras que los israelíes culpan a los jordanos de haberlo contaminado en extremo. Lo cierto es que el otrora mítico río Jordán, lugar donde según la Biblia fue bautizado Jesús, sea hoy una magro riachuelo contaminado.
Resulta paradógico (o tal vez oportuno) que el Mar Muerto esté considerado como uno de los lugares más votados en el concurso Las 7 Maravillas Naturales del mundo. Urge hoy una acción conjunta de las naciones involucradas, que trascienda diferencias políticas, religiosas o culturales. Afortunadamente hay un proyecto de Jordania de tomar agua del Mar Rojo para luego de desanilizarlo y utilizarlo, verter las aguas al Jordán y así volver a llenar el el Mar Muerto, un proyecto en el que los israelíes parecen prestos a colaborar.
Porque, aunque suene extraño, urge salvar al Mar Muerto. Que no ocurra otra tragedia como en el Mar Aral.
Sí, es cierto. Ese lago-mar es un lugar muy interesante; cerca de ahí está Qumram donde se hallaron los rollos que están en el museo del libro en Jerusalem. Y cerca de ahí se halla Sdom. Lo interesante es que es una depresión haciéndolo el lugar más bajo del nivel del mar en tierra. Bañarse ahí sí es terrible; la primera no lo hice, porque me había afeitado. La segunda sí te da una rara sensación de su naturaleza aceitosa. Alucinante son las formaciones de sal. Cerca de ahí hay un interesante parque que se llama Ein Gedi. Ojalá se salve, y que sirva de ejemplo para otros raros proyectos que proponían para el río Amazonas destruyendo la selva que lo rodea. Una perla del actual presidente que tenemos.
ResponderEliminarEscalofriantes las imágenes de la desecación del Mar Muerto. Es verdad que entre unos y otros no se ponen de acuerdo para conservar esta maravilla. Nosotros lo hemos visitado desde Israel y desde Jordania y los Israelies cuidan muchísimo mas su parte que los Jordanos. Las playas de Israel están con una capa perfecta de salitre, en cambio en Jordania se presentan algunas zonas en muy mal estado. Esperemos que pronto se haga algo para salvar esta maravilla. Saludos Carlos.
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